¿EXISTE CRISIS VOCACIONAL, ÉTICA Y DE PRINCIPIO EN EL EJERCICIO DEL PERIODISMO?
( Porque las armas de nuestra guerra no
son carnales, sino poderosas por Dios para derrumbar cosas fuertemente atrincheradas, 2 Corintio
10, 4)
Una pregunta parecida a la que establece
el titular de este articulo, le fue formulada al periodista Rafael Molina
Morillo, en Febrero 2011, Revista F.Global Democracia y Desarrollo, Volumen 8,
número 38, ¿Ademas de una Crisis financiera, hay una crisis profesional en los Medios
de Comunicación, y se cuestiona su credibilidad? Morillo respondió, Cuando se cuestiona la credibilidad de un medio o
del periodista, es porque se ha dado motivo para dudar de la honestidad”
Muchas son las ramas del saber profesional que se
tildan de estar sumida en una crisis moral o de principios que la conforman ,
pero lo cierto es que sus actores son quienes están abatido por esa crisis
moral cuando realizan cualquier actividad profesional y olvidan sus
obligaciones públicas o privado, la ambición y deseo excesivo se denomina
codicia, los humanos estamos constituido estructuralmente por una conducta
degradante en contra de los principios deontológicos que prevén un ejercicio profesional
con justicia en cualquier área que se practique.
La pregunta que se hace referencia en el titular
establecido no es directa al periodismo pero sí al ejercicio del mismo, sus postulados éticos deben estar siempre
sujeto a esas normas deontológicas que contemplan limpieza moral en el
ejercicio, el vampirismo profesional ha sido una práctica deshonesta que se ha
hecho costumbre para hacer fortunas indebida con la ignorancia de las necesidades
de los usuarios, el mal no está en la profesión practicada, está en el ejerció
de los actores, Médicos, Ingenieros,
periodistas, Abogados, Profesores ect, y los engaños puesto en práctica, todas
las áreas del saber, incluida el periodismo, están sujetas a normas de
principios establecida legal y moralmente.
El ejercicio del periodismo conduce al juzgamiento
de conductas en diversas direcciones, y que pueden afectar o defender intereses
de grupos e intereses individuales, difícil es denunciar cosas verdaderas que
afecten sectores políticos, empresariales, religiosos y económicos, contarle a
los lectores cosas que los poderosos y las autoridades gobernantes no quieren ,
decirle al pueblo en las páginas de los periódicos, revistas y programas
noticieros, las aberraciones en que caen grupos sindicales y gremios
profesionales con grupos empresariales y autoridades, para resolver situaciones
que terminan en conflictos de negocios.
El periodismo Vocacional y con bases preceptúales,
no está, ni estuvo en crisis nunca, ni cuando se le hizo la pregunta al amigo Molina Morillo, hemos estado en crisis y estaremos en crisis moral y ética, los
que hemos puesto en práctica un ejercicio periodístico con intereses
particulares, defendiendo sectores que ofrecen prendas económicas para
disfrazar la verdad de lo sucedido, una vez chantajear al poderoso por prebendas
y otras veces limpiándolo para salvarlo con honra que no tienen, crisis han
formulado los actores que han ejercido la prensa como periodismo, sin conocer
la diferencia que existe en uno como plataforma y el otro, como doctrina.
El Periodismo se sustenta en principios y valores
éticos aferrado a la verdad traducida como eficacia, responsabilidad y
fiscalizador de las riquezas del estado como patrimonio público, el rol del
periodista en el ejercicio del periodismo debe ser como acero irrompible con la
defensa de los hechos ciertos y la justeza de las cosas, debe ser como espejo
con imágenes nítidas y sin distorsiones, como en espejos rotos que se fragmentan
las imágenes, en una se vuelven muchas
imágenes.
El periodismo
verdadero no cae en falsedades impuesta por sectores de poder que le fastidia
la postura y responsabilidad de investigaciones de certezas en los hechos
sucedidos, por un periodista con vocación de servicios a favor de los intereses
sociales que vayan en beneficios de los pueblos para defender los más
necesitados, un ejercicio periodístico sin atadura, sin chantaje para cambiar
resultados, responsable y eficaz de las investigaciones no acepta crisis
vocacional, ni de sus principios éticos en ningún momento, solo son los
actores que negocian situaciones utilizando lo que no conocen como doctrina de
limpieza, responsabilidad, verdades o certezas-
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